El 3 de septiembre de 2020, la Secretaría de Economía publicó en la edición matutina del Diario Oficial de la Federación (DOF) el “DECRETO por el que se modifica la Tarifa de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación”, el cual entró en vigor al día siguiente de su publicación. Puede consultarse aquí.

Este decreto introdujo nuevas fracciones arancelarias para clasificar vehículos automóviles eléctricos, estableciendo aranceles de importación entre el 15% y el 20%, dependiendo del tipo de vehículo. Sin embargo, exentó temporalmente dichos aranceles, independientemente del país de origen, para tres tipos de vehículos eléctricos nuevos: los destinados al transporte de diez o más personas, los vehículos ligeros y los diseñados para el transporte de mercancías. Esta exención estuvo vigente hasta el 30 de septiembre de 2024.

Originalmente, se estableció un periodo de vigencia de poco más de cuatro años con dos objetivos: i) observar las preferencias de los consumidores y ii) orientar a la industria nacional hacia la producción de este tipo de vehículos, facilitando el acceso de los consumidores a nuevas tecnologías limpias en el transporte.

La exención de aranceles buscó evitar que el pago de estos desincentivara la importación de vehículos eléctricos, que juegan un papel crucial en el cumplimiento del compromiso de México bajo el Acuerdo de París de 2016, que exige reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030, utilizando el sector de transporte como una de sus estrategias clave.

Aunque hasta la fecha no se ha emitido una declaración oficial por parte del gobierno mexicano sobre la posible renovación de este beneficio, existen diversos incentivos gubernamentales para los consumidores de vehículos eléctricos, como estacionamientos preferenciales, exenciones de pago de tenencia y verificación, la posibilidad de circular todos los días debido a sus bajas emisiones, e incluso deducciones fiscales. Estos incentivos podrían influir positivamente en la demanda de estos vehículos y en la competencia en el mercado.

El Decreto, junto con los beneficios gubernamentales, constituye un esfuerzo importante para fomentar la adopción de vehículos eléctricos. Aunque la continuidad de estos beneficios aún es incierta, su impacto en la demanda y competitividad es claro, al promover un cambio hacia un transporte más sostenible a nivel nacional.

Nuestro equipo de Comercio Exterior y Aduanas está disponible para asesorarlo en mayor detalle sobre los efectos de este Decreto en sus operaciones y para evaluar e implementar las acciones necesarias en relación con los nuevos aranceles descritos.

Este boletín fue preparado por Jose Alberto Campos Vargas ([email protected]);  Eduardo Sotelo Cauduro ([email protected]) y Fernanda Sanchez Castillo ([email protected]).